Cuando la fe desaparece, aparece el deseo; pero el deseo también se agota, poco a poco se desvanece... y así sobreviene el ansia.
Ansia que lo consume todo; lo devora todo, lo destruye todo y pide más. Se come el espacio, se come el tiempo, se come el cielo y se come la tierra. No puedes respirar, no puedes caminar. Se come la luz y las bombillas. Te quedas a oscuras. Se come la cama, te deja sin sábanas. Se come tu ropa y te quedas desnuda. Se come las puertas. Estás sin salida. Se come las ventanas. Estás atrapada. Se come el pasillo, y la calle y más allá. Te vacía por dentro, y te vacía fuera. Se están repartiendo el pastel de tu cumpleaños y te da lo mismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario