jueves, 15 de febrero de 2007

Yo Confieso

Yo confieso. Yo confieso que ayer, día 14 de febrero, en un intento desesperado por dejar atrás la envolvente melaza propia del Día de San Valentín -parejas de enamorados abstenerse de dejar comentarios bucólicos- acudí a mi videoclub habitual con la intención de montarme una buena sesión fílmica a base de “patadas y puñetazos”.

Obviado las parejas autoinducidas a coma diabético que se arrepujaban en las secciones de drama y comedia, y tras una rápida ojeada a la sección de producción nacional, me dirigí con la velocidad del correcaminos en un domingo de invierno a las cuatro de la madrugada, sobre las filas de títulos de acción; ese género tan poco reconocido por la crítica especializada y tan descaradamente explotado por los medios de comunicación.

Agobiada por el exceso “Cage” -¿Alguién se ha dado cuenta de que el tal Nick está en todas partes? El Señor de la Guerra, World Trade Center, The Wicker Man… y ahora, ¿¡El Motorista Fantasma!?*-, decidí hacer la vista gorda a los super-hits y pasar directamente a esas cintas que yacen olvidadas en los estantes inferiores…
Y así, en el extremo final de la segunda fila, descubrí una carátula que llamó mi atención: “Héroes del Cielo(Les Chevaliers du Ciel). Un título que a priori puede sonar a secuela de Top Gun, pero que ¡Dios bendiga a Francia! supone la alternativa europea. Una adaptación del comic-book de Jean-Michel Charlier (Blueberry) que recrea las andanzas del Capitan Antoine "Walk'n" Marchelli y su acelerado co-piloto.

El film, una producción francófona, cuenta con la colaboración del ejército aéreo francés; y las secuencias de vuelo resultan realmente espectaculares. Sin efectos especiales y sin paneles de control con lucecitas parpadeantes; las acrobacias lucen en todo su realismo, sin necesidad de pasarte la mitad del metraje viendo el cogote del piloto y el casco de su compañero.

¡Stop! Antes de que las hordas de puristas indies se me echen encima o me manden directamente a la pira por mi selección, quiero hacer hincapié en la nacionalidad de la misma. ¿Acaso no reconoceremos las bondades del cine galo? Luc Besson, Francis Veber, Claude Chabrol, Jean-Christophe Grangé, Gerard Depardieu, Jean Reno… y una larga lista de iconos cinematográficos corroboran mi apuesta.

Entre los créditos, destaca la dirección de Gérard Pirès (Taxi) y la actuación de Benoît Magimel (La fleur du Mal, Les Rivières pourpres II: Les anges de l'apocalypse)

La trama, en sí un liviano argumento de aventuras, sirve de escenario para el lucimiento de las peripecias a cielo abierto. Unas imágenes impresionantes.
  • El guión: adecuado, dada el objetivo del film. Trivial pero entretenido. Con los toques justos de humor y dramatismo que sólo nuestros vecinos fronterizos combinan en pantalla con tanta espontaneidad.
  • Cámara/fotografía: Correcta. Impecable en las tomas aéreas.
  • Los protagonistas: Ellos, seguros de sí mismos, atléticos, leales, honrados hasta la médula y con ese punto de arrogancia seductora innata en los franceses. Ellas, de tacón alto y ropa ajustada ¡cómo no!. Los hombretones hablan de chicas y de aviones. Las féminas, de negocios, armas y dinero. ¿Qué más se puede pedir?
  • El vestuario: correcto, al estilo prêt-à-porter europeo. Uniformes vigentes, con algunas licencias que sólo los más entendidos se atreverán a discutir.
  • Violencia: la justa. Con varios tiros, alguna que otra explosión y un par de asesinatos.
  • Sexo: por supuesto, aunque intuitivo y escueto. Una escena para cada protagonista. Y una secuencia a lo Demi Moore en Striptease ¡sobre el ala de un reactor!, que hará las delicias de los más machos. ¡Para tenerla en cuenta a la hora de seducir al personal!
  • Humor: garantizado. Y digo humor, no carcajada grotesca (típica de productos norteamericanos)

Muy recomendable para quitarse el regusto dulzón de "Top Gun", y hacer las paces con el ejército del aire (corre que vuela…).

Por lo demás, 3 euros de coste por 24 horas, y 1 hora 42 minutos de metraje a todo color de entretenimiento garantizado. Con esta elección, te ganarás sin duda el respeto del colectivo masculino (que por preferencia y salvo raras excepciones, resuelven vehículos rápidos+tías+deportes). Y para nosotras, basta con fijarnos en los cuerpazos con indumentaria de combate y uniformados de gala que posan en la contraportada de la carátula. Después de todo, elegir un film de acción puede tener su recompensa…jejeje.

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* ¡El mundo del celuloide va de mal en peor! ¡Ya sólo falta que la joven “Pe” se lleve el Oscar! Mis respetos por la chica Almodóvar… pero ¿categoría Hellen Mirren / Meryl Streep? ¿Qué está pasando en Hollywood?
Y “a propósito de Henry”, un apunte más. Coincidiréis conmigo en que Streep es una gran actriz… pero nominarla por su actuación en The Devil Wears Prada, ¿no os resulta una tanto sospechoso por no decir penoso?

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