jueves, 15 de febrero de 2007

Agradecimientos

Quiero dedicar este blog a todas aquellas personas que han sabido aguantarme en los tiempos previos a la era cibernética. A todas aquellas personas que han soportado mis llamadas telefónicas a horas intempestivas, mis mensajes de texto compulsivos y mis largas sesiones de “mensajería instantánea”. Gracias a los habitantes de ICQ, Yahoo Messenger, MSN Messenger y G-Talk. Sobretodo gracias, a aquellos compañero/as que han sabido resistir estoicamente mis desvaríos cara a cara. Y más aún, a esas pocas personas que se han comprometido en debatir mis argumentos.
También gracias, a todos aquellos que aquejados por el acoso mediático de mis correos habéis optado por no responderme o hacerme llegar vuestros lamentos, que hoy cesarán.
Todos vosotros habéis hecho posible la construcción de este espacio. Por todo eso y a todos, os doy las gracias.

Especial mención a mi socio, con el 99% del total de acciones de la empresa; gracias por hacer la vista gorda mientras actualizo este cuaderno dentro de mi horaio laboral.

Algunos de vosotros os reconoceréis en estas líneas; otros probablemente no os acordareis y los más, ni siquiera las leeréis. Pero todos estaréis en mis recuerdos y los más queridos, en mi corazón.

  • Gracias por haberme retirado del banquillo, y haberme estrechado entre tus brazos. Gracias por dejarme beber de tus manos. Todavía puedo sentir la suavidad del cachemir y el olor a jabón.
  • Gracias por ser mi “solete”, mi luz, mi faro en la oscuridad. Gracias por atreverte a sentir, y sentir con intensidad. Gracias por tu valentía.
  • Gracias por ser el espejo en el que quiero reflejarme. Gracias por mostrarme la libertad hasta el final de tus días.
  • Gracias por alzarme a tocar la campana. Por mostrarme el cuco que canta las horas. Por descubrirme el aroma de la pipa, y el sabor del tabaco, y por las bolsas de Conguitos.
  • Gracias por ese beso furtivo, robado por sorpresa.
  • Gracias por un fin de semana paradisíaco. Un oasis en medio del desierto.
  • Gracias por acogerme en momento delicado de mi vida. Gracias por ese sopa de fideos, ese pescado al horno y ese afectuoso cobijo.
  • Gracias por unas sesiones de cine inolvidables. Por un matinée que duró hasta la 19:00; y por darle una paliza de ajedreza mi padre. Los Chupa-chups a 0’50 céntimos son un robo a mano armada, lo recuerdo bien. Gracias por estar ahí aunque no nos veamos tanto.
  • Gracias por volver a dibujarme una sonrisa en el rostro y por acelerar mi corazón al ver tu nombre en mi bandeja de entrada. Gracias por compartir un taxi, un par de Heineken, unos vaqueros y un manchego semi. ¿Once más dos?
  • Criss-Cross, contigo las palabras sobran.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo mejor de todo es la categoría "amistad"... tengo la lagrimilla a punto de caer al suelo.
Me podrías haber dedicado un punto. "."

NuNa dijo...

Cínico... {Aquí tienes no uno, sino ¡tres puntos!, suspensivos}

;]